domingo, 1 de junio de 2014

Ese incómodo momento en el que...

...las cuentas no te salen. ¡Sobra por todas partes!...quizás no. Sí, definitivamente sí. Hay muchas personas en el mundo. Pero a su vez cada una es muy distinta: reemplazable y única al mismo tiempo. Pero sigue habiendo un baile de números. No sabes si es uno o son dos.
Miras de arriba a abajo sin decir nada. Esa sonrisa idiota te sale sin querer. Es una de esas cosas que no se preguntan porque puedes acertar de pleno o minar la moral al sujeto en cuestión. Decides no decir nada y que el misterio se resuelva por sí solo. Pero tu mirada te delata. No sabe por qué la miras, pero sabe que la miras por algo y te dice:
-¿Qué pasa? No paras de mirarme.
-Es que hace mucho que no te veo y estás muy guapa-, dices.
De menuda te has librado. Quizás se lo crea y piense que no te has dado cuenta. Quizás aún sea un secreto. Aunque también puede que no haya secretos.
Tienes una bolsa de chuches en las manos y se la ofreces. De pronto piensas si haces bien o no. Quizás esté a dieta y haya sucumbido a la tentación por culpa tuya, aunque peor es tener nariz de regaliz o una verruga con forma de mora.
Te despides sin salir de dudas. Deseas que sean dos, incluso tres, pero hasta dentro de cuatro meses no sabrás si en ese momento, esos cinco minutos en los que la viste, le quedaban seis meses de embarazo o le sobraban siete kilos de peso.

2 comentarios:

  1. Me ha pasado,... pero a mi me pierde la boca
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En realidad haces bien...pero hay días en los que la sinceridad se me resiste.
      Besos

      Eliminar