sábado, 26 de agosto de 2017

No es elegante matar a una mujer descalza.

En un sótano de Madrid encuentran el cadáver de una mujer. A partir de esta premisa comienza una novela ambientada a finales de los años noventa que cruza un puente con 1978, año en el que se cometió el crimen de esta señora que resultó ser una especie de Mata Hari checoslovaca con amantes españoles.
A cargo de este caso nos encontraremos al enigmático detective JB, que aparte de tener las mismas iniciales del famoso whisky nos hará sonreír una y otra vez. Es un personaje al que se le coge cariño, pues, pese a tener muchas aficiones en común con Cristina Pedroche, resulta enternecedor lo campechano que es.
La resolución del caso es algo frustrada y no le da el significado real a la novela; es más bien "la escusa" para escribirla. Aunque la descripción de las aficiones de la muerta es bastante curiosa por lo extravagante que es.
Destaca la comparación entre ambas épocas, las similitudes y diferencias y el ambiente que se respira en cada una de ellas. Se trata de 216 páginas de fácil lectura de la mano de Raúl del Pozo, periodista al que le ha dado por escribir novela y, en mi modesta opinión, no se le da nada mal.

viernes, 25 de agosto de 2017

Pedro Páramo

Juan Rulfo escribió esta novela en 1955. Ésta, una anterior a ella y una posterior componen su colección completa de obras. Pero, pese a su escasa recopilación, considerado unos de los novelistas mexicanos más importantes del siglo XX.
Se trata de una obra englobada dentro del género "realismo mágico", pues cuenta la historia de un muchacho que le promete a su madre que irá a buscar a su padre para que les dé los que les debe. La madre muere y, en un principio, no pretende cumplir su con su palabra, pero empieza a tener sueños con su difunta madre y decide encaminarse hacia su destino. Llega al pueblo de su padre, que ya ha fallecido, y se encuentra con muchos habitantes que se apellidan igual que él. Descubre que muchos de ellos son hermanos suyos, pues su padre era bastante mujeriego. Descubre muchas características de su progenitor mediante las conversaciones con vivos y muertos que en esta novela se entremezclan y puede resultar difícil distinguirlos.
Destacan los conocimientos geográficos del autor, en especial, de los nombres antiguos de los lugares.
Se ha dicho que esta obra le hace un guiño a la teoría estética de Theodor Adorno y a otras obras famosas.
hay muchas teorías al respecto que pueden ser respaldadas con una confesión del autor: Al parecer, de pequeño tenía acceso a la biblioteca del cura del pueblo que confiscaba libros con la escusa de que no eran apropiados, pero en realidad se deleitaba con ellos.
Se trata de una novela corta, un poco atípica, en la que puede costar adentrarse, pero una vez conseguido, se te habrá hecho corta. Me recuerda un poco al estilo de Laura Esquivel y  Gabriel García Márquez, quizás por el género literario.

jueves, 24 de agosto de 2017

Las historias de Marta y Fernando

Marta y Fernando es la historia de dos enamorados que viven en Valladolid en plena transición. En el libro podemos ver cómo son los sentimientos de estos dos protagonistas y cómo los demuestran, teniendo en cuenta dónde y cuándo se encuentran. La relación no es precisamente fogosa. Sus encuentros sexuales son escasos y poco satisfactorios. Quizás tampoco se pueda decir que la novela tenga una trama que te mantenga en vilo. Destacan más las situaciones descritas en el contexto sociocultural de la época, los microrrelatos que nos teletrasportan a finales de los años setenta en una España desestructurada y a la espera de un porvenir incierto con esperanza. Destacan las distintas filiaciones políticas del momento, que dan pinceladas de color a la estructura argumental de este volumen de 285 páginas. De hecho, Fernando forma parte de na de ellas y eso le dará bastante carácter al personaje y ayuda a entenderlo mejor.
Marta, en cambio es una soñadora, que como cualquier mujer de aquella época tiene aspiraciones que deberán adaptarse al machismo y al sistema patriarcal imperante en aquella época y que a día de hoy sigue sin estar erradicado.
Como decíamos hace unas líneas no existe una trama argumental per se, sino que se trata de una serie de descripciones, de pequeñas historias autoconclusivas muy impactantes, junto a otras cotidianas. Destaca también que algunos de sus capítulos están redactados en primera persona y otros en tercera. Mi parte preferida es la argumentada por Marta al final del libro.
Cabe mencionar que esta obra recibió el premio Nadal de 1999 y que su autor es Gustavo Martín Garzo, nacido en 1948 en Valladolid. También me gustaría decir que hoy es la romería de mi pueblo, las calles están llenas de gente y hacen una escandalera que ni pa qué. ¿Que qué tiene que ver con el libro? Nadita de nada, pero les quería describir la situación. ¿Ustedes suelen ir a las romerías o a las fiestas de los pueblos?